América Latina
Aplazada audiencia contra Espaillat por caso discoteca Jet Set
Tribunal dominicano reprograma la sesión para el próximo miércoles tras solicitud de la defensa de los hermanos imputados

El Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, en la República Dominicana, aplazó hasta el próximo miércoles la audiencia para conocer la medida cautelar contra el empresario Antonio Espaillat, propietario de la discoteca Jet Set, cuyo techo colapsó el pasado 8 de abril dejando un saldo de 236 fallecidos y más de 180 heridos en Santo Domingo.
La decisión se tomó este domingo, casi una hora después de iniciada la audiencia, a petición de la defensa legal del empresario y de su hermana, Maribel Espaillat, también imputada. El abogado defensor, Miguel Valerio, explicó que la Fiscalía entregó nuevos documentos el sábado y solicitaron más tiempo para analizarlos.
El Ministerio Público solicita prisión preventiva para ambos acusados, a quienes responsabiliza de graves omisiones en las condiciones estructurales y operativas del establecimiento nocturno. Según la investigación preliminar, Jet Set operaba sin las adecuadas inspecciones técnicas ni permisos actualizados.
Antonio Espaillat fue trasladado esposado, con casco de protección y chaleco antibalas desde la cárcel del Palacio de Justicia, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad. Su hermana Maribel, quien también está detenida desde el jueves, fue llevada a la audiencia custodiada por agentes. Sin embargo, fue regresada posteriormente a una clínica, donde permanece por razones médicas.
La tragedia ha generado un profundo impacto en la sociedad dominicana y ha encendido un debate sobre la regulación de locales públicos y las responsabilidades civiles y penales de los propietarios. Organizaciones de derechos humanos y familiares de las víctimas han exigido justicia y castigo ejemplar para los responsables.
Hasta el momento, el Ministerio Público ha adelantado que cuenta con peritajes estructurales, reportes de los cuerpos de emergencia y testimonios de sobrevivientes que apuntan a una negligencia grave por parte de los dueños del local.
Vía EFE