Opinión
Sarisariñama: Profundidad en las alturas
En el corazón del estado Bolívar yace Sarisariñama, una sima colosal de origen natural, aún inexplorada en su totalidad, símbolo de biodiversidad y misterio.

Por: Jaime Largo. Nos volvemos a encontrar en esta nueva aventura, una muy singular y misteriosa, conocida por pocos, vivida por casi nadie. Son pocos los afortunados que han tenido el privilegio de adentrarse en las profundidades de las mayores simas del mundo entero (sí, esta sima es con s), y entendemos por ellas a las cavidades grandes y muy profundas que encontramos en la Tierra, y nuestro invitado de hoy será una de ellas: el enigmático y desconocido Sarisariñama.
Confieso que tuve que investigar, ya que son muy pocos los bendecidos que han podido conocer este maravilloso y único lugar en todo el planeta, debido a su lejana y complicada ubicación geográfica, lo que a mi parecer es una bendición. Lo anterior no lo comento por egoísmo; simplemente, a nosotros, los seres humanos, aún nos falta mucho por aprender, por saber cuidar y proteger, y en este caso en específico, conservar lo que aún no se ha tocado.
El Sarisariñama posee un inmenso potencial e interés científico y natural gracias a sus características geológicas, fauna y flora que alberga en su interior, prácticamente desconocido por el hombre. Por ser un destino remoto y de muy difícil acceso, contribuye a su preservación al no ser un punto vulnerable a personas que no comprendan su belleza e importancia en todos los sentidos.
El Parque Nacional Jaua-Sarisariñama es un parque de Venezuela, localizado al suroeste del estado Bolívar, lugar donde nacen los ríos Caura, Erebato y Ventuari. Este hermoso, vasto e inhóspito paraíso vegetal se encuentra formado principalmente por tres mesetas de arenisca de la formación Roraima, las cuales han sido llamadas por el pueblo indígena de los maquiritare: Jaua-Jidi, Sarisariñama-Jidi y Guanacoco-Jidi. Este insólito lugar de nuestra geografía posee muchas maravillas desconocidas por la mayoría de la humanidad. Sin embargo, algo que sí sabemos es que contamos en nuestro país con la cueva sima Humboldt o sima Mayor, la cual representa una estructura en forma de sumidero de enormes proporciones en la cima de la meseta del tepuy Sarisariñama, de nuestro inigualable estado Bolívar. La misma tiene un diámetro en la boca de 350 metros y una profundidad de 350 metros igualmente.
Lo poco que sabemos de este misterioso lugar se lo debemos en gran parte a quien considero un verdadero influencer, y no acostumbro a usar ese título. Me refiero a un estudioso empedernido y sediento de conocimiento sobre estas culturas ancestrales de nuestras selvas. Este Indiana Jones venezolano no podría ser otro que nuestro gran Charles Brewer Carías, quien ha descubierto más de 20 especies de animales y plantas distintas en nuestra geografía. También es el descubridor de las cuevas del cerro Autana en 1971, las simas de Sarisariñama en 1974, y recientemente, un sistema de cuevas de cuarcitas en el tepuy de Chimantá que llevan su nombre, y contribuyente directo en la investigación de la biodiversidad, geología y las tradiciones indígenas locales.
La historia de este descubrimiento es logísticamente complicada, ya que para la época no se contaba con la tecnología que hoy podemos disfrutar; no había imágenes de satélite, radar, drones, ni mapas. Lo que había era tiempo, distancia y rumbo, en palabras de Brewer Carías. Fue un viaje que tuvo que realizar sin el acompañamiento de los yekuanas debido a sus creencias acerca de la presencia de una deidad en forma de águila gigantesca que devoraba personas y se posaba sobre la montaña. Sobre este lugar, desde esa época, los locales han hablado de luces extrañas que entran y salen de la montaña. Es un lugar con una energía increíble, colmado de secretos y misterios aún sin resolver y relatado por quienes habitan esas tierras. Venezuela definitivamente es una tierra de gracia, maravillas y misterios.
*Jaime Largo. Animalista, amante de la naturaleza, senderista, vicepresidente Fundación Colinas de Carrizal.
Correo: jaimel2010@gmail.com @caminandoconjaime2 @jaimelargo2021

Interior de la sima Humboldt, con 350 metros de profundidad y ecosistemas únicos.