El volcán de Fuego, el más activo de Centroamérica, registra una nueva erupción y obliga a evacuar a miles de personas en el sur y oeste de Guatemala. Las autoridades de Guatemala recomendaron la evacuación inmediata de 30.000 personas debido a la creciente actividad del volcán de Fuego, ubicado entre las provincias de Escuintla, Sacatepéquez y Chimaltenango. El coloso, de 3.763 metros de altura, ha incrementado su actividad desde la noche del domingo, arrojando cenizas hasta los 7.000 metros de altura.
Evacuaciones y albergues habilitados
La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) informó que hasta el momento 282 familias han sido trasladadas a un refugio en San Juan Alotenango, en Sacatepéquez. Además, se habilitó otro albergue en el municipio de Santa Lucía Cotzumalguapa, en la costa sur del país.
«Estamos ante una situación de alto riesgo. Recomendamos la evacuación inmediata de 30.000 personas que podrían verse afectadas», afirmó Claudinne Ogaldes, secretaria ejecutiva de Conred.
Suspensión de clases y advertencias aéreas
El Ministerio de Educación suspendió las clases en Alotenango, Escuintla, Siquinalá y San Pedro Yepocapa, zonas cercanas al volcán. Asimismo, el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) advirtió a las aerolíneas sobre la presencia de cenizas en la atmósfera, lo que podría afectar las operaciones aéreas en la región.
Antecedentes de actividad volcánica
El volcán de Fuego había estado inactivo durante aproximadamente 50 días antes de esta nueva erupción. Su última gran actividad ocurrió en junio de 2018, cuando una potente erupción causó la muerte de más de 400 personas y destruyó varias comunidades cercanas.
Monitoreo y medidas de prevención
Las autoridades continúan monitoreando la actividad del volcán para tomar medidas adicionales si la situación se agrava. La Conred y otros organismos de emergencia instan a la población a seguir las indicaciones oficiales y mantenerse informados sobre el avance de la erupción.
Vía EFE