IVIC impulsa proyecto del guacuco para fortalecer la seguridad alimentaria en Barlovento

El estudio se desarrolla en las costas de Valle Seco y Laguna La Reina, en alianza con comunidades y organizaciones locales.

Guacuco como recurso estratégico nacional

Investigadores del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) desarrollan un ambicioso proyecto en las costas de Barlovento. El objetivo es aprovechar de forma integral el guacuco (Tivela mactroides), un molusco bivalvo clave para la economía local.

La propuesta está liderada por la doctora Ana Yndira Ramos Villarroel, del Laboratorio de Valoración y Aprovechamiento de Recursos Marinos del Centro de Oceanología y Estudios Antárticos (COEA).

Este recurso es vital en localidades como Higuerote, municipio Brión del estado Miranda, donde representa una fuente de empleo y sustento para numerosas familias.

Estudio ecológico y propuesta alimentaria

La investigación incluye el análisis de la ecología del guacuco, su crecimiento, abundancia y características físicas como talla y peso. También se estudiará el rendimiento del saco de tejido blando, es decir, su carne comestible.

“Pretendemos estudiar al guacuco en todos sus aspectos. Desde su ecología hasta su utilidad alimentaria y productiva”, explicó Ramos Villarroel.

Además, el equipo científico promueve su transformación en productos no perecederos como harina y conservas. Esto podría ampliar su mercado y dinamizar la economía de las comunidades costeras.

Conchas del guacuco: residuo convertido en oportunidad

Otro eje del proyecto es el aprovechamiento de las conchas del guacuco como materia prima secundaria para obtener productos químicos de valor agregado.

Las conchas suelen acumularse como desecho en las costas, afectando al ecosistema. Ahora se busca convertirlas en fuentes útiles de calcio.

“Del guacuco se puede extraer hidróxido, cloruro y carbonato de calcio, usados en industrias como la alimentaria, farmacéutica y de la construcción”, precisó la investigadora.

Articulación con comunidades barloventeñas

El proyecto incluye encuentros con guacuqueros y prestadores de servicio de Playa Valle Seco y Laguna La Reina. La Fundación Ecobrión acompaña este proceso comunitario.

“No existe un registro reciente sobre la población del guacuco. Se extrae sin control, sin respetar el tamaño mínimo, y en condiciones poco higiénicas”, advirtió Ramos Villarroel.

Como parte de la propuesta, se plantea fortalecer la inocuidad de productos etnogastronómicos locales y brindar asesoría sanitaria en el procesamiento y distribución de alimentos.

Comunidad comprometida con el desarrollo

Los habitantes de Valle Seco han mostrado disposición para colaborar. Su participación activa es clave para garantizar la sostenibilidad del guacuco y la transformación social de la zona.