El Parque Nacional El Ávila sufre durante la época de sequía debido a los constantes incendios. Para protegerlo, el juzgado décimo séptimo de primera instancia ha decretado medidas «precautelativas ambientales».
La Guardia Nacional se encargará de la vigilancia y control de accesos, mientras que los funcionarios de Inparques permitirán solo la visita a algunas áreas específicas del parque.
Durante la época de sequía (enero a junio), se prohíbe la pernocta dentro de los límites del parque y se permitirá solo en posadas designadas para ese fin. Además, se revisará a todas las personas y objetos que ingresen al parque para evitar la introducción de materiales o elementos acelerantes que puedan causar incendios.
Las medidas son anunciadas por el Sindicato Único Nacional de trabajadores de Inparques.
La protección del Parque Nacional El Ávila es crucial para la conservación de su biodiversidad y el mantenimiento de sus recursos naturales.
EFE
