Connect with us

Estados Unidos

¿Quién sigue en la lista? La deportación como castigo político en la era Trump

Trump reabre el expediente del miedo: amenaza con revocar ciudadanías y deportar incluso a quienes nacieron en suelo estadounidense.

Compartir enlace
Periodista Daxy Oropeza

Published

on

Un nuevo ciudadano recibe su certificado de naturalización en Chicago. ¿Será suficiente para garantizar su permanencia?
El presidente Donald Trump revive el fantasma de la desnaturalización, apuntando a millones de ciudadanos naturalizados y, en un giro más inquietante, también a nativos.

Especial.- Mientras celebró el Día de la Independencia ondeando banderas, Trump sopla vientos de exclusión con un proyecto que amenaza la esencia misma de lo que significa ser estadounidense.

Desde la Casa Blanca, y con un lenguaje a medio camino entre el sarcasmo y la amenaza, el presidente Donald Trump volvió a desafiar los límites legales y morales del país. Esta vez, insinuó la posibilidad de deportar incluso a ciudadanos nacidos en Estados Unidos, agitando un espectro que parecía enterrado: el de la desnaturalización masiva.

«La ciudadanía ya no es un escudo»: ¿a quién le toca ahora?

Las declaraciones de Trump, disparadas con aparente ligereza durante un intercambio con la prensa, dejaron una pregunta peligrosa flotando: ¿puede un presidente decidir quién merece ser ciudadano? En el centro de la polémica está Elon Musk, a quien Trump mencionó como posible blanco de deportación. Aunque nacido en Sudáfrica y ciudadano estadounidense naturalizado desde 2002, Musk representa a millones de personas en similar situación legal.

La amenaza de despojar de la ciudadanía a inmigrantes naturalizados no es solo retórica. Bajo el mandato de Trump, el Departamento de Justicia ya ha ejecutado al menos un caso confirmado: el de Elliot Duke, exsoldado británico, quien fue desnaturalizado tras una condena por delitos graves.

«El precio de disentir»: cuando la ley se convierte en arma política

La administración Trump ha clasificado la desnaturalización como una de sus prioridades. Y aunque la ley contempla ese proceso en casos extremos —crímenes de guerra, fraude o amenazas a la seguridad nacional—, su aplicación expansiva puede abrir la puerta a decisiones arbitrarias. ¿Qué ocurre cuando disentir del gobierno se convierte en motivo suficiente?

Abogados de inmigración advierten que incluso errores administrativos o declaraciones incompletas durante el proceso de naturalización podrían ser utilizados para justificar la revocatoria. El mensaje es claro: el margen de error se estrecha para quienes no nacieron en EE.UU.

¿Quién sigue en la lista?

Los ciudadanos naturalizados, aunque hayan vivido décadas en el país, pagado impuestos y criado hijos estadounidenses, ahora enfrentan una incertidumbre jurídica creciente. La “gran idea” de Trump no se detiene ahí: planteó, en tono casi distópico, la posibilidad de expulsar incluso a personas nacidas en Estados Unidos si se sospecha que hubo fraude en su registro de nacimiento.

El abogado Jaime Barrón lo aclara: “No se le puede quitar la ciudadanía a alguien que nació en EE.UU., salvo que se demuestre un fraude documentado. Pero incluso eso sería jurídicamente muy difícil”.

Entre DOGE, Musk y la democracia

El caso de Musk, un magnate con múltiples ciudadanías y una influencia descomunal, es solo el símbolo de algo mayor: la instrumentalización del poder presidencial para castigar la disidencia. En una ironía cruel, el mismo Elon Musk que financió parte de la campaña de Trump, ahora es blanco de su retórica más agresiva.

Cuando la nación expulsa a sus propios hijos

Este no es solo un debate legal, es una crisis identitaria. ¿Qué tipo de país deporta a quienes hicieron todo por pertenecer? ¿Qué mensaje se envía a las nuevas generaciones de inmigrantes que juran lealtad bajo promesas constitucionales?

Hoy más que nunca, la ciudadanía debe ser más que un documento: debe ser un compromiso con la justicia, no una herramienta de exclusión. Porque si permitimos que se desnaturalice la ley, lo siguiente podría ser desnaturalizar la democracia.

«Cuando el gobierno teme al pueblo, hay libertad. Cuando el pueblo teme al gobierno, hay tiranía.» Thomas Jefferson

Por: Daxy Oropeza @daxyoropeza

Con información de CNN / Foto cortesía

Visita nuestra tienda en Amazon: Gentedehoy_20

Aquí más contenido de Estados Unidos 

Loading

Compartir enlace

Daxy Oropeza* @daxyoropeza Lic. en Comunicación Social. Escritora. Directora del periódico Gente de Hoy. Conductora de La Entrevista en MIRA TV. Defensora de Derechos Humanos.